Hoy vamos a empezar fuerte: si crees que leyendo artículos en blogs vas a aprender a escribir, lo llevas clarinete. Así que, si quieres ser escritor, no leas este artículo. No dejes que pasen esos 10 segundos que concedes al autor al entrar en su blog y vete de éste ¡ya! Deben de quedarte dos o tres… ¡Corre!
L’enfant terrible
Sí, hoy voy a tocarte narices, pero es por tu bien, créeme y, si todavía no te has ido, déjame que te lo cuente.
Verás, el hecho de que en el colegio te enseñaran a silabear, después a leer y más tarde a escribir no significa que estés capacitado para escribir una novela.
Para algunos parecerá una obviedad; pero para otros, no. Lo digo porque lo he visto muchas veces. No se llega a ser escritor a través del colegio.
¿Aún sigues por aquí? Vale, si te has quedado, volvamos a lo nuestro: decía que el hecho de que te enseñaran a juntar letras y te des cierta maña para escribir la lista de la compra no te convierte en escritor.
Te lo diré de otra forma, a ver si así lo entiendes bien, por si acaso se te ha escapado el sentido de la frase: yo sé tararear canciones y eso no me transforma en Beethoven. Tú sabes hacer la lista de la compra y eso no te convierte en Goytisolo (que en paz descanse).
¿Lo vas captando?
No desesperes
Si de verdad quieres ser escritor, aún estás a tiempo de arreglarlo.
Voy a contarte la triste verdad de todo el tinglado que se ha construido alrededor de la escritura aprovechándose de las ilusiones de la gente:
Blogs como éste no valen para nada
¿Qué haces aquí? ¿Por qué no estás estudiando y practicando? Cada minuto que pasas en este blog es un minuto perdido (así que búsquese la puerta de salida un poco más arriba), salvo que lo utilices como trampolín para saltar a una verdadera formación.
Ya, tus talleres, ¿no?
Pues no, listillo, te equivocas. Voy a mostrarte lo que tienes que hacer si de verdad quieres aprender a ser escritor. Y lo voy a hacer en fotos para hacerlo más visual.
1. Lee
Para ser escritor, primero tendrás que leerte todo esto:

Esa tele lleva 3 años sin encenderse
Y esto:

Sí, ya hasta pongo estanterías dobles.
Y esto:
Y esto:
Y toda la biblioteca familiar (ahora repartida entre los hermanos tras la muerte de mi madre):

Recreación de la biblioteca familiar
O sea, como resumen del primer punto: lee, lee mucho, muchísimo. Un escritor que no lee no podrá jamás llegar a ser un gran novelista.
2. Estudia
Cómprate todos estos libros:
Y estúdiatelos. Toma apuntes e intenta llevar a la práctica lo que has aprendido. No te saldrá a la primera, ni a la segunda, ni a la tercera, pero estarás en camino… Ser escritor no es nada fácil, además de leer mucho hay que estudiar otro tanto.
Y, sí, los libros que te enseño están en inglés porque la mayoría de lo que se publica en español es filfa (aunque hay excepciones, así que sé muy selectivo). Si puedes, busca bibliografía en inglés. Hay muchísimo más que lo que encontrarás escrito en español y, generalmente, mucho mejor.
3. Haz talleres de escritura
Yo no paro. Enlazo uno detrás de otro. Ahora estoy con los de Holly Lisle. ¡Una auténtica gozada!
Sé listo y pregunta e infórmate antes de apuntarte a uno. La mayoría de los que se ofrecen en lengua española ni siquiera merecen el tiempo que se emplea en leer la página de venta.
Por cierto que, llegados a este punto, sí, te recomiendo los míos que puedes encontrar aquí 😉
¿Bueno, y ya está? ¿Así seré escritor?
Pues no.
Nada de esto será suficiente si no lo llevas a la práctica.
Ahora llega el momento de sufrir:
¡de ponerse a escribir!
4. Practica
Anda por ahí la teoría de las diez mil horas. El tiempo necesario para adquirir la práctica que te convertirá en maestro del arte en el que desees destacar. Gabriella Campbell te explica aquí cómo aprovecharlas y también te da una buena lección de lo que significa la práctica en 14 lecciones que he aprendido después de 1.095 días de escritura.
Estas dos últimas puertas de salida que te he dejado sí te enseñaran algo. Si yo fuera tú, las aprovecharía.
Conclusión
No te ofendas por el inicio de este post. Todos los escritores han pasado por esa etapa en la que sabían escribir, es decir, transcribir a lengua escrita lo dicho en lengua oral o los pensamientos o los sentimientos…, pero no eran novelistas. Pasar por el colegio no te hace escritor, como tomarr unas clases de música no te convierte en compositor. Mira, este fin de semana quedé a comer con algunas escritoras. Una de ellas, que fue profesora de escritura, me dijo: «¿Pero cómo voy a enseñar las bases de un género -aquél del que ella se hacía cargo- si los alumnos que me llegan ni siquiera saben escribir?».
Tienes mucho trabajo por delante si quieres llegar a ser escritor. Puedes conseguirlo. Pero no hay atajos. Créeme.
P.D.
Mientras escribo este artículo, el cartero acaba de llegar y me ha traído esto:
No dejes de aprender nunca. Pero, por favor, deja de perder el tiempo con blogs y aprende bien.
Lo de no dejar de aprender nunca es un gran consejo. Ahora, una cosa te digo, yo soy niña logse, y ni tan mal 😛 Biquiños!
Porque tú eres niña LOGSE leída, mi Cris querida. 😉
Y por eso recomiendo su libro: “Detrás de la pistola”. Como esta niña LOGSE persevere, tendremos una maestra del crimen psicológico. Y, si no, al tiempo.
Besotes.
Qué mala fama tenemos los de la LOGSE. Yo soy de la primera hornada, ¿me salvo o es aún peor? Quitado de eso, estoy totalmente de acuerdo contigo.
Saludos.
Sorry 🙁 Me puede mi frustración como profesora. A lo largo de los últimos 20 años he visto cómo descendía el nivel académico de mis alumnos a base de las penosas leyes de educación.
Si perteneces a la primera hornada, tú tienes suerte. Ni te imaginas lo que viene ahora… 😉
Totalmente de acuerdo con casi todo, Ana. No vuelvo a visitar este blog 😛
Por cierto, no soy de la LOGSE, pero me ha costado resolver la operación para publicar el comentario.
¿Que no vuelves a visitar el blog? ¡Castigado al rincón! 😉
Muchas gracias por pasarte y por tu comentario 🙂
Hola Ana, muy interesante tu blog. ¿Por casualidad no tenés una lista de esos libros en inglés que mencionás? Saludos.
Sí, Mati. Si me das unos días, te hago aquí mismo una lista 🙂
¡Hola Ana! Excelente post. Estoy viendo este post en 2021 y veo que no está la lista que le prometiste a Mati ?. Si puedes postearla sería súper interesante. ¡Gracias!
Ay, lo sé. No llego, no llego. Quizá algún día… 🙂
Directo a la cara. Qué gran artículo.
Gracias 🙂
Pues a mi me ha parecido un artículo magistral jajajja muy bueno.
Gracias 🙂
Toda la razón, Ana. ¡Toda! Yo no me he dedicado a la enseñanza, pero soy padre de tres hijos y abuelo de dos nietos; creo que ello me da cierta autoridad sobre el tema.
Conozco los planes de educación desde el ya lejano del 52 (en carne propia) hasta el último (mi nieto pequeño tiene ocho años). El “decrescendo” ha sido vertiginoso, lo que añadido al hecho de que el punto de partida ya no era gran cosa… ¡En fin!
Aun y así podéis daros con un canto en el pecho los que, por vuestra situación geográfica dentro de España, no tenéis que soportar la ración, fuerte y muy sazonada, de adoctrinamiento político en el aula.
Pero yo soy optimista. Siempre es posible aprender. Costará más o menos, pero lo que puede hacer uno, lo puede hacer cualquiera (si tiene ganas y pone empeño, claro).
Hola Jorge.
Lo de vernos libres del adoctrinamiento político (imagino de cuál hablas) es un consuelo, aunque hay de otros tipos, no creas. Los colegios se utilizan para propagar ideas sutilmente y los centros se pliegan a ello. Lo más triste es ver que las generaciones futuras cada vez están peor preparadas (en todos los sentidos, no sólo en el aspecto académico, también para afrontar la vida) y que por más que tú te dejes el alma en el aula, todo el sistema funciona contra ti y tus esfuerzos son vanos. ¡Es tan triste…!
Muchas gracias por tu visita y por tu comentario, tan valiente 🙂